Reciban un cordial saludo del CEENSABAP. Nos dirigimos en esta oportunidad para comunicar lo siguiente.
Transcurridos 7 meses desde que la Comisión de Adecuación de la estructura académica y administrativa de la Escuela Nacional Superior Autónoma de Bellas Artes del Perú recibió el encargo mediante Resolución Suprema 001-2009-ED de reorganizar a nuestra Institución, teniendo como objetivo con el fin de realizar las gestiones y modificaciones pertinentes para el cumplimiento de las disposiciones de la Ley 29292, que faculta a la Escuela Nacional Autónoma de Bellas Artes del Perú emitir grados académicos y títulos de valor universitario.
Los alumnos que en momentos de emitirse dicha Resolución, nos encontrábamos en Asamblea Permanente, en protesta por la indiferencia que manifestaba el estado frente a nuestra problemática institucional; una deficiente curricula para el nivel superior, un insuficiente presupuesto, una infraestructura seriamente afectada por el paso del tiempo y los movimientos sísmicos de años recientes, además de la ausencia de una autoridad legítimamente elegida, tras las constantes intervenciones que socavaron el clima institucional y permitieron las irregularidades cometidas en el área académica durante el año pasado.
Por ello, y en preocupación por el devenir de nuestra Escuela, propusimos la instalación de una comisión de alto nivel, que nos permita adecuarnos de la mejor manera a lo dispuesto en la Ley 29292, y los requisitos de la Ley 23733, Ley universitaria. Encabezando esta propuesta se encontraba el Dr. Ricardo Estrabidis, reconocido profesional e investigador en el campo de las artes. Esta propuesta contaba con la aprobación de la Comisión de Educación del Congreso Nacional de la Republica, a quienes nos dirigimos en búsqueda de soluciones a la crisis de nuestra Escuela, y esperando únicamente la aprobación de dicha propuesta por parte del Ministerio de Educación, quienes mantuvieron el silencio y la inacción de los últimos años en prejuicio de nuestra Institución.
Luego de 80 días de protestas legitimas dentro y fuera de nuestro local; ante la mirada atónita de la opinión publica y los medios de prensa, el Gobierno emite la Resolución citada anteriormente, encargándose la reorganización y restructuración académica y administrativa a la Comisión conformada por Víctor Delfín, quien la preside, Herbert Rodríguez, Jesús Ruiz Durand (que hace algunos meses presento su carta de renuncia) y Luis Guillermo Cortes. Decisión que no fue bien recibida por la comunidad bellasartina, por tratarse de una solución con tintes políticos, inadecuados para resolver problemas académicos y administrativos como los que afronta aun nuestra Escuela.
A pesar de esto, dejando de lado las diferencias, nos acercamos a la Comisión dispuestos al dialogo constructivo, con la decisión de apoyar en todo tipo de trabajo siempre y cuando se apunte a la reorganización y mejoramiento de nuestra Institución, haciendo llegar nuestros alcances y propuestas sobre reformas de malla curricular, estatuto y otros documentos de gestión, aportes que veníamos desarrollando durante todo nuestro proceso de lucha estudiantil, con el apoyo de especialistas de diversas instituciones afines.
Sin embargo, la Comisión que preside el Sr. Víctor Delfín ha respondido negando nuestro derecho a participar activamente en los cambios de nuestra escuela, llegando incluso a cuestionar nuestra representatividad como Centro de Estudiantes, argumento al que se suma la recientemente designada directora académica Prof. Liliana Melchor Agüero, cuya situación actual en el mencionado cargo rechazamos por no representar una mejora al clima institucional de nuestra Escuela, ya que pesan sobre ella cuestionamientos por gestiones anteriores en el mismo puesto.
Queremos resaltar que si bien las actividades académicas en nuestro centro de estudios se encuentran en receso, eso no evita que los alumnos que sentimos un compromiso con nuestra escuela continuemos trabajando por la educación que todos merecemos, iniciativa que venimos demostrando con las actividades que organizamos como representantes estudiantiles, tales como cursos, talleres, conferencias, seminarios y demás que gestionamos por cuenta propia, teniendo como obstáculos a las personas que por el momento han asumido responsabilidades por nuestra educación, el Sr. Delfín y la Prof. Melchor.
La Comisión nunca tuvo en su agenda la participación estudiantil, tal como lo declararan los miembros que la conforman, con mayor énfasis de quien la preside, el Sr. Víctor Delfín. A pesar de las jornadas de protesta que protagonizamos, la imposición de una sola visión antes que el debate, parece ser la premisa de estas autoridades.
El producto que, frente a nuestra insistencia, presentaron los encargados de los principales documentos de gestión en nuestra casa de estudios no justifica todo el tiempo de trabajo que ha transcurrido desde el mes de Marzo. Diferentes observaciones se han presentado frente a estos dos puntos (malla curricular y estatuto) resaltando entre los mas significativos el mantener la nomenclatura de la Institución, y por tanto la categoría de rango superior.
La malla curricular pretende eliminar otro principio básico de la universidad; la libertad de cátedra e imponer una metodología pedagógica que si bien en otro contexto podría arrojar resultados positivos, hoy por hoy no es la mas conveniente y menos con los cursos que se presentan como propuestas para su desarrollo.
La preocupación que como estudiantes manifestamos es real y comprensible porque somos nosotros quienes hemos participado en jornadas de lucha por una educación digna saliendo a las calles en marchas pacificas pidiendo la reestructuración de nuestra escuela, somos quienes al final hemos conseguido la oportunidad de un cambio real para nuestra institución, la cual corre el peligro de frustrarse por intereses políticos y mezquinos.
Es por esto que los alumnos con el único interés de conseguir una real adecuación de nuestra institución, nos reafirmamos en pronunciar:
Que esta comisión se ha instalado como resultado de la lucha incesante del alumnado por la modernización y mejoramiento de nuestra institución y no para responder intereses personal ni político.
Que es un derecho para cualquier ciudadano el recibir una educación digna, científica y democrática, y un deber del estado disponer lo necesario a través de las instancias correspondientes, brindarlas y facilitar su cumplimiento.
Que rechazamos la actitud y posición asumida por la comisión Delfín, negando la participación a los alumnos en el proceso de adecuación y reestructuración institucional.
Que a pesar de los constantes maltratos por parte de la Comisión y la Dirección Académica a nuestra organización estudiantil, mantenemos como ideal el trabajo en conjunto; participativo, inclusivo y democrático. Ya que estamos dispuestos siempre a aportar con la mejor de las intenciones en las tareas que se planteen, por el beneficio de nuestra Institución y el interés por la educación que ella brinda, de la cual seremos directos beneficiados o afectados.
Transcurridos 7 meses desde que la Comisión de Adecuación de la estructura académica y administrativa de la Escuela Nacional Superior Autónoma de Bellas Artes del Perú recibió el encargo mediante Resolución Suprema 001-2009-ED de reorganizar a nuestra Institución, teniendo como objetivo con el fin de realizar las gestiones y modificaciones pertinentes para el cumplimiento de las disposiciones de la Ley 29292, que faculta a la Escuela Nacional Autónoma de Bellas Artes del Perú emitir grados académicos y títulos de valor universitario.
Los alumnos que en momentos de emitirse dicha Resolución, nos encontrábamos en Asamblea Permanente, en protesta por la indiferencia que manifestaba el estado frente a nuestra problemática institucional; una deficiente curricula para el nivel superior, un insuficiente presupuesto, una infraestructura seriamente afectada por el paso del tiempo y los movimientos sísmicos de años recientes, además de la ausencia de una autoridad legítimamente elegida, tras las constantes intervenciones que socavaron el clima institucional y permitieron las irregularidades cometidas en el área académica durante el año pasado.
Por ello, y en preocupación por el devenir de nuestra Escuela, propusimos la instalación de una comisión de alto nivel, que nos permita adecuarnos de la mejor manera a lo dispuesto en la Ley 29292, y los requisitos de la Ley 23733, Ley universitaria. Encabezando esta propuesta se encontraba el Dr. Ricardo Estrabidis, reconocido profesional e investigador en el campo de las artes. Esta propuesta contaba con la aprobación de la Comisión de Educación del Congreso Nacional de la Republica, a quienes nos dirigimos en búsqueda de soluciones a la crisis de nuestra Escuela, y esperando únicamente la aprobación de dicha propuesta por parte del Ministerio de Educación, quienes mantuvieron el silencio y la inacción de los últimos años en prejuicio de nuestra Institución.
Luego de 80 días de protestas legitimas dentro y fuera de nuestro local; ante la mirada atónita de la opinión publica y los medios de prensa, el Gobierno emite la Resolución citada anteriormente, encargándose la reorganización y restructuración académica y administrativa a la Comisión conformada por Víctor Delfín, quien la preside, Herbert Rodríguez, Jesús Ruiz Durand (que hace algunos meses presento su carta de renuncia) y Luis Guillermo Cortes. Decisión que no fue bien recibida por la comunidad bellasartina, por tratarse de una solución con tintes políticos, inadecuados para resolver problemas académicos y administrativos como los que afronta aun nuestra Escuela.
A pesar de esto, dejando de lado las diferencias, nos acercamos a la Comisión dispuestos al dialogo constructivo, con la decisión de apoyar en todo tipo de trabajo siempre y cuando se apunte a la reorganización y mejoramiento de nuestra Institución, haciendo llegar nuestros alcances y propuestas sobre reformas de malla curricular, estatuto y otros documentos de gestión, aportes que veníamos desarrollando durante todo nuestro proceso de lucha estudiantil, con el apoyo de especialistas de diversas instituciones afines.
Sin embargo, la Comisión que preside el Sr. Víctor Delfín ha respondido negando nuestro derecho a participar activamente en los cambios de nuestra escuela, llegando incluso a cuestionar nuestra representatividad como Centro de Estudiantes, argumento al que se suma la recientemente designada directora académica Prof. Liliana Melchor Agüero, cuya situación actual en el mencionado cargo rechazamos por no representar una mejora al clima institucional de nuestra Escuela, ya que pesan sobre ella cuestionamientos por gestiones anteriores en el mismo puesto.
Queremos resaltar que si bien las actividades académicas en nuestro centro de estudios se encuentran en receso, eso no evita que los alumnos que sentimos un compromiso con nuestra escuela continuemos trabajando por la educación que todos merecemos, iniciativa que venimos demostrando con las actividades que organizamos como representantes estudiantiles, tales como cursos, talleres, conferencias, seminarios y demás que gestionamos por cuenta propia, teniendo como obstáculos a las personas que por el momento han asumido responsabilidades por nuestra educación, el Sr. Delfín y la Prof. Melchor.
La Comisión nunca tuvo en su agenda la participación estudiantil, tal como lo declararan los miembros que la conforman, con mayor énfasis de quien la preside, el Sr. Víctor Delfín. A pesar de las jornadas de protesta que protagonizamos, la imposición de una sola visión antes que el debate, parece ser la premisa de estas autoridades.
El producto que, frente a nuestra insistencia, presentaron los encargados de los principales documentos de gestión en nuestra casa de estudios no justifica todo el tiempo de trabajo que ha transcurrido desde el mes de Marzo. Diferentes observaciones se han presentado frente a estos dos puntos (malla curricular y estatuto) resaltando entre los mas significativos el mantener la nomenclatura de la Institución, y por tanto la categoría de rango superior.
La malla curricular pretende eliminar otro principio básico de la universidad; la libertad de cátedra e imponer una metodología pedagógica que si bien en otro contexto podría arrojar resultados positivos, hoy por hoy no es la mas conveniente y menos con los cursos que se presentan como propuestas para su desarrollo.
La preocupación que como estudiantes manifestamos es real y comprensible porque somos nosotros quienes hemos participado en jornadas de lucha por una educación digna saliendo a las calles en marchas pacificas pidiendo la reestructuración de nuestra escuela, somos quienes al final hemos conseguido la oportunidad de un cambio real para nuestra institución, la cual corre el peligro de frustrarse por intereses políticos y mezquinos.
Es por esto que los alumnos con el único interés de conseguir una real adecuación de nuestra institución, nos reafirmamos en pronunciar:
Que esta comisión se ha instalado como resultado de la lucha incesante del alumnado por la modernización y mejoramiento de nuestra institución y no para responder intereses personal ni político.
Que es un derecho para cualquier ciudadano el recibir una educación digna, científica y democrática, y un deber del estado disponer lo necesario a través de las instancias correspondientes, brindarlas y facilitar su cumplimiento.
Que rechazamos la actitud y posición asumida por la comisión Delfín, negando la participación a los alumnos en el proceso de adecuación y reestructuración institucional.
Que a pesar de los constantes maltratos por parte de la Comisión y la Dirección Académica a nuestra organización estudiantil, mantenemos como ideal el trabajo en conjunto; participativo, inclusivo y democrático. Ya que estamos dispuestos siempre a aportar con la mejor de las intenciones en las tareas que se planteen, por el beneficio de nuestra Institución y el interés por la educación que ella brinda, de la cual seremos directos beneficiados o afectados.
CEENSABAP
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